El crecimiento sostenible de las empresas pasa por un análisis consistente de las amenazas y oportunidades identificadas en el mercado.
En este contexto, es fundamental el seguimiento de clientes, proveedores y competidores. La estructuración de este proceso de análisis facilita la toma de decisiones y el mapeo de riesgos.
Innove más rápido que sus competidores y anticipe las tendencias del mercado.
La estructuración de este proceso incluye el análisis de los principales competidores y sus estrategias de fabricación y suministro, socios estratégicos en nuevos desarrollos, posicionamiento del portafolio de productos y servicios, oportunidades de fusiones y adquisiciones de empresas.
Esta estructuración trae ganancias significativas en términos de planificación de la empresa, ya que los ejecutivos pueden evaluar las mejoras internas con base en el análisis de mercado.
